
Edades: 3 a 6 años
¿Qué se hace?
Se trata de rastrear el trayecto que siguen los productos alimenticios que se consumen en la
casa desde su fabricación hasta que llegan a la mesa. Pensar por ejemplo, sobre el origen de
la salsa de tomate. ¿De qué está hecha la salsa de tomate? ¿De dónde salen los tomates? Y
partir desde que se siembra la semilla, se espera a que crezcan los tomates, se cortan, se
lavan, se muelen se condimentan, se prepara la salsa, se envasa, se coloca en cajas, se
distribuye a las tiendas y los supermercados para que la compremos nosotros para ponerle a
la comida. ¿Qué otros productos pueden rastrear?
Con esta actividad estimulamos:
La imaginación
Niños y niñas en edad preescolar están empezando a desarrollar el pensamiento abstracto.
Ya son capaces de crear una representación mental de algo que no están viendo o
conociendo a través de sus sentidos. El estímulo de la imaginación es una estrategia para
potenciar el desarrollo del pensamiento abstracto. Pedirle al niño o a la niña que vea con su
imaginación la semillita del tomate y luego siga mentalmente el recorrido de esa semillita que
vio, desde que se plantó hasta que llegó a su casa convertida en salsa de tomate es un reto
para su pensamiento.
Identificación de secuencias
Las relaciones causa-efecto son las primeras que los bebés empiezan a entender. Desde los
primeros meses en su cuna aprenden que si lloran, alguien aparece. También, si hay móviles
o juguetes en su cuna, aprenden a patearlos o a mover sus manos para hacerlos moverse o
sonar. En estas sencillas acciones, la relación causa-efecto está presente y eso les
demuestra que hay muchísimas cosas que pueden ser provocadas por ellos mismos. Es un
aprendizaje vital para la búsqueda de respuestas y crecimiento personal en los años
posteriores. De esta cuenta, la identificación de lo que debe pasar para que en la mesa
tengan salsa de tomate es un ejercicio retador.
La representación gráfica o física
Para complementar la actividad pueden exponer el proceso de elaboración con productos
reales tales como las semillitas, una plantita, artículos para la elaboración de la salsa y el
producto final. También pueden hacer dibujos para representan el proceso. Pueden incluir
flechas para que parezca un verdadero diagrama.
El pasado, el presente y el futuro
Toma varios años para que los niños y las niñas aprendan a distinguir entre tiempo presente,
tiempo pasado y tiempo futuro. El aprendizaje es natural si tienen constantemente referencia
del pasado y del futuro cuando sus padres les hablan sobre lo que hicieron ayer y lo que
harán el fin de semana, por ejemplo. Al rastrear los orígenes de la salsa de tomate, se ayuda
a los niños y las niñas a retroceder en el tiempo y ubicarse en el pasado para saber lo que
pasó. También se les puede llevar al futuro imaginando una deliciosa salsa de tomate a partir
de las semillitas que hay dentro de un tomate.
¡Que se diviertan y aprendan mucho!
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Área Exclusiva para Socios:
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