
En la época de Navidad, cuando el comercio bombardea con ideas de consumo a los más
pequeños, este cuento ofrece una maravillosa oportunidad para reflexionar sobre el valor de la
oración y el mejor regalo que se puede hacer a alguien que sufre.
Antes de empezar a leer el cuento:
Lean el título y comenten que no se sabe quién lo escribió. Si tienen oportunidad
Hablen sobre ¿quién es Santa Claus? ¿qué hace en Navidad?
Pregunten a su hijo o hija si le gustaría hacerle una pregunta a Santa Claus. Dejen que le
"hable" al dibujo de la pantalla o de la hoja impresa.
Durante la lectura:
Intenten dar respuesta a la pregunta del niño sobre por qué nunca se acaban los juguetes de la
bolsa de Santa Claus. Dejen que sus hijos imaginen el porqué.
Piensen en alguien (conocido o en general) por quien puedan decir una oración esa noche y la
noche de Navidad.
Hablen sobre cómo nos comunicamos con Dios y qué les gustaría más: estar muy triste, pero
tener muchos juguetes o estar muy feliz y tener pocos juguetes. Presten atención al
razonamiento de los niños, será interesante escuchar si relacionan o no el sentimiento de
tristeza con la ausencia de bienes materiales.
Al final de la lectura:
Hagan una oración por quien hayan identificado que la necesita.

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¡Que vivan un bello momento de reflexión y comunicación con Dios!
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Área Exclusiva para Socios:
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Guía de lectura: Secretos de Santa
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